A 176 años de la épica batalla de Vuelta de Obligado, en que la valentía Argentina enfrentó a la superioridad tecnológica de la flota Anglosajona… y luego en posteriores combates: Toneleros, San Lorenzo y finalmente Angostura del Quebracho a 8 meses de la primer batalla, se completa la gesta que da fin a las aspiraciones imperialistas Anglosajonas…
«Qué los tiró a los gringos…
Juni’ gran siete…
Navegar tantos mares,
Venirse al cuete, que digo…
venirse al cuete…»
La canción de Miguel Brascó y Alberto Merlo resume perfectamente las consecuencias de aquel enfrentamiento, que ha sido un rasgo común en nuestra historia jalonada por coraje y sangre, donde el gauchaje ha sido actor principal exaltado por los valores patrióticos que se transmitían con dedicación y sacrificio.
La bravura y lealtad de aquellos paladines fue suficiente para evitar la dominación física y comercial que se proponían Ingleses y Franceses… Pero su traza de piratas no abandonó la lucha… Y con el tiempo y en forma subliminal continuaron esquilmando estas tierras del sur… No nos olvidemos de la Forestal ni tampoco del máximo robo de las Islas Malvinas…
La lucha por la Soberanía todavía sigue… sin desterrar la solidaridad hacia todos los pueblos de la tierra, no nos olvidemos de luchar contra aquellos que quieren apropiarse con atropello esgrimiendo el derecho del supuesto progreso imponiendo idiomas y despreciando las culturas locales…
Ahijuna Canejo con esos maulas!
La lucha por la soberanía es algo permanente… ahora las conquistas no se hacen con ejércitos, sino que socavan la INTEGRIDAD de una Nación… invaden su idioma, dominan sus empresas, compran sus tierras y fomentan las contiendas entre sus habitantes… que con el tiempo terminan siendo extranjeros en su propia tierra…
Hoy nuestra Argentina acaba de debatirse en una contienda electoral con un ganador que no será el único responsable de defender la soberanía. Detrás de él deberá estar la totalidad de los legisladores, políticos y cada uno de los ciudadanos para la defensa de un bien común tan grande como la propia Democracia.
El desafío de hoy por mantener nuestra soberanía requiere de la madurez de todos los Argentinos… y ser capaz de construir con la diferencias…
Recordemos que: «Una Nación es tan fuerte como lo sea el carácter de sus ciudadanos»
Debemos recuperar nuestra INTEGRIDAD y en estos tiempos aciagos, evitar que se nos nuble la visión, podamos salvar nuestras diferencias y juntarnos por los verdaderos objetivos de justicia y libertad…
… Los hermanos sean unidos,
porque esa es la ley primera;
tengan unión verdadera
en cualquier tiempo que sea,
porque si entre ellos pelean
los devoran los de ajuera…