No importa donde estemos, que religión profesemos, cual sea la doctrina política en la que militemos, cuan pobres o cuan ricos seamos… no podemos negar que a pesar de las diferencias hay «algo», una cosa que nos iguala, de la que dependemos «todos» sin lugar a dudas… y esa es, la que los Sudamericanos llamamos «Pachamama»…
La Madre Tierra, generosa Pacha, nos ofrece sin retaceos el fruto de su seno… de ella crecen poderosos troncos y preciosas flores, árboles con deliciosos frutos y mieses que un día serán pan… crea cauces para que el agua corra libremente en ellos, hermosamente cristalina o turbia de nutrientes… en torrentes o piélagos… nos provee de refugio o nos permite que usemos sus materiales para construir nuestros hogares…
Y todas las criaturas gozan en ella…
No es raro que el ser humano, que, a lo largo de su historia, ha sido capaz de someter y abusar de sus iguales sea la criatura que al mismo tiempo de ser quién más disfruta de la tierra,  también la degrada con crueldad…  solo por mencionar unos datos: Estados Unidos ha realizado 1052 detonaciones atómicas, Rusia 969, Francia 210, China y Gran Bretaña 45 cada una… no importa si ha sido en su propio suelo o ajeno, si era desierto o no… la Víctima excedió a la Tierra y al tiempo…
Tambien crea máquinas que la horadan, manipulando su suelo y su agua, en su afán de erigirse sobre el resto de las especies y sobre si mismo… sin piedad estruja la tierra, la consume y contamina, e impone condiciones sobre sus hermanos… en un supuesto afán de progreso…
Así como es necesaria la Paz entre todos los seres humanos, también es necesaria la Paz con la Tierra que pisa, para que no la sigamos degradando…. y así encontrar la armonía que nos permita ayudar al Hermano que «no puede» o «no tiene» y «construir» una Tierra de todos…
Somos nosotros quienes debemos actuar… nuestra Pachamama no necesita hacer nada… tiene el tiempo de su lado, solo debe esperar…  y somos nosotros los que debemos entender…
El ritual de la Pachamama en cada 1° de Agosto, es una costumbre ancestral Incaica con raíces Quechua y Aymara, a la que bien pueden agregarse detalles de otras culturas… como es el caso de nuestro Litoral que le agrega la Caña con ruda en lugar de la Chicha original… pero ninguna de las adaptaciones ha dejado de lado los deseos de Salud, Fecundidad y el Respeto por la Tierra…
Hemos padecido un problema Global que fue la Pandemia, deberíamos estar aprendiendo de él… sin embargo las guerras siguen… debemos reaprender a vivir y necesitamos tener Memoria para reconstruirnos, porque son otros los problemas más graves que nos acompañan desde que el Hombre empezó a odiar…
Estamos en una sola Casa y es de Todos… es necesario cuidarla y también a quienes están en ella… así que usemos el «Don» de la Inteligencia que se nos ha dado y pongámoslo con el Mandamiento de «Amar al prójimo» para hacerlo TODOS JUNTOS y crear el «Mundo de hermosura que los Antiguos dicen», como nos enseña Antonio Esteban AGÜERO en su poema «CANCION DEL PARA QUÉ DE LAS MÁQUINAS»
Namasté.