Regreso seguro

Un marzo que parece fin de año… se preguntaran por que digo esto… bueno, pues, una cosa que determina que está llegando el fin de año, son, por antonomasia los Actos de Colación, también conocidos como Actos de Promoción o Graduación…
Este año ha sido un año muy singular, donde Profesores y Maestros realizaron una tarea monumental, pero que solo se ha podido visualizar en el seno de la familia y muchos no han podido ver el esfuerzo diario y la adaptación que realizaron, tanto los Docentes como los alumnos…
Ahora se les presenta un nuevo desafío… el de el nuevo paradigma de la Educación… cargado de protocolos… con más horas de las asignadas (por lo presencial y lo virtual) que no serán remuneradas; con barbijos y máscaras que dificultan la comunicación y la respiración; con pocos alumnos en el aula que vienen una semana si y otra trabajan en la casa;  con la imposibilidad del abrazo afectivo (que enseña más que algunas clases magistrales) y la sonrisa oculta remplazados por miradas significativas y golpecitos de codos o de puños…
No será un pequeño esfuerzo para quienes están acostumbrados a compartir, alternar con multitudes, al bullicio, a los abrazos, a los cordones desatados y los guardapolvos mal prendidos… ahora el protocolo exige distanciamiento, nada de compartir y cada uno tiene que arreglarse con sus cosas… la manipulación de los objetos requiere el baño previo por la «neblina alcohólica» para poder pasar de una persona a otra…
Con todas estas cosas, resulta difícil pensar en intercambiar libros y apuntes, lápices o sacapuntas… o resolver un problema en grupo… y mucho menos compartir un mate mientras analizan un cuento de Quiroga, una poesía de Borges o el Quijote de Cervantes… ni hablar de tocar el mismo instrumento, sea guitarra, flauta, piano o bombo legüero…
Como sea de dificultoso, siempre es mejor que lo del año que pasó,  en el que solo se vieron a través de los visores de los teléfonos… y claro, ya terminó… y hay que dar el cierre a un año tan difícil… y volvemos a lo que decía al principio, al Acto de Promoción… que habitualmente es en fin de Noviembre o en Diciembre… esta vez, teniendo en cuenta las dificultades ocasionadas por la pandemia… en Marzo!!!
Los Actos Escolares tienen también su protocolo de realización… y pueden ser Forma I, II, III, IV y V; en esos números, para los que están o estuvimos en las Escuelas, nos indican desde una clase abierta hasta un Acto con todos los «chiches» en la Plaza Principal…
A los Actos de Colación o Promoción o como les quieran llamar, les corresponde la Forma II, la que tiene por norma estas indicaciones:
a)Presentación de la bandera; 
b)Himno Nacional Argentino; 
c) Discurso alusivo por un miembro del  personal directivo, docente o
especial (duración máxima: 10 minutos); 
d) Números a cargo de los alumnos, discursos o despedidas; 
c) Marcha patriótica (en Venado Tuerto es la Marcha San Lorenzo); 
d) Retiro de la bandera. 
Ahora, parece ser, que la pandemia tiene efectos mutilatorios con los Actos… no se puede juntar tanta gente como antes, así que la asistencia no es obligatoria… Como no se pude manipular e intercambiar elementos, o tenés un micrófono para cada uno o arreglarse a los gritos, no se entregan Diplomas, ni recuerdos ni distinciones… no se puede hacer el intercambio de Bandera de los salientes a los nuevos… así que mejor no presentar la Enseña Patria… y cantar no se puede, pues, cuando se canta las microgotas de Flugge, (portadoras de virus) recorren más distancia… por lo que Himno no…
Así que les resumo… Los Asistentes Escolares, previo registro de temperatura y rociado de manos con alcohol al 75% guiarán al Promocionado y sus dos Familiares a sus asientos que estarán  distanciados;  la o el Dire les dice unas palabritas, los Profes les proyectan un Video con anécdotas y los alumnos seguramente eligieron un compañero que se despide en nombre de todos… y después… «taza taza, cada cual a su casa»…
No es broma, así me han dicho que ha llegado a las Escuelas el protocolo para los Actos… y aunque coincido en el cuidado, no puedo estar de acuerdo con la AUSENCIA DE LA BANDERA ni del HIMNO… Símbolos máximos de nuestra Argentinidad…
Que estos protocolos no mutilen el Patriotismo de las futuras generaciones… la Bandera, ponela en un rincón… arriba de una tarima, para que todos los alumnos la vean y recuerden que los cobijó en los años que pasaron por la Escuela y la tengan presente cualquiera sea su destino futuro… y el Himno… hacelo sonar… que lo canten bajito, con la boca cerrada, en lengua de señas o agiten un pañuelo… pero que escuchen su letra y su música… la que tantas veces los hizo emocionar… en actos o en eventos deportivos, la que representa a tantos Héroes conocidos y tambien desconocidos que con su férrea lucha y su ferviente laboriosidad dejaron vida, sangre y sudor para construir esta Argentina, hoy bastante vapuleada, pero que siempre… siempre…. se merece un destino de grandeza…
Los años venideros, quizás sean los más difíciles de muchos tiempos; por eso, cuando todos vuelvan a su casa… seguramente a llorar por no haber podido abrazar a su Profe o Alumno querido… por saber que muchos compañeros tienen destinos diferentes y se verán muy poco, porque esa casa que los albergó ya no será su casa… por todo eso y por mucho más, que en cada una de esas lágrimas esté la certeza que… en ese Tiempo, en esa Escuela, con esos Amigos, bajo esa Bandera y al son de ese Himno se formó un Argentino de Bien…
Egresados… mucha Felicidad y Esperanza…
Docentes y Personal Escolar… Felicitaciones…

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